Comprar carne ecológica es una de las mejores decisiones que puedes tomar en cualquier época del año. No obstante, durante el verano tienes que tomar precauciones en su conservación, al igual que con el resto de alimentos. Por ello, vamos a proporcionarte algunos consejos que te serán muy útiles para mantenerla siempre en perfecto estado.
El calor causa estragos en todos los alimentos y el verano es la época más peligrosa en este sentido, ya que cualquier contacto con la temperatura ambiente puede ser perjudicial, provocando indigestiones e intoxicaciones no deseadas.
Ante esta tesitura, en Campos Carnes Ecológicas lo ponemos de nuestra parte para la perfecta conservación de todos nuestros productos. A la hora de comprar carne ecológica online, presentamos nuestras carnes envasadas en bandejas termoselladas. Además, la cadena de frío se mantiene durante todo el transporte, oscilando la temperatura entre los 2º y los 4º C, por lo que la seguridad alimentaria está totalmente asegurada
Una vez el producto llegue a casa, podrás congelarla o hacer lo que te plazca con ella, pero siempre manteniendo las precauciones para preservar su estado. Por ello, presta mucho atención a los siguientes consejos. Te ahorrarás más de un disgusto, si los sigues a rajatabla.
1. ¡Cuidado con la compra!
En muchas ocasiones, el hecho de comprar la carne en un establecimiento puede ser un peligro, si al salir de él, transcurre demasiado tiempo hasta regresar a casa.
Durante esos minutos, teniendo en cuenta las altas temperaturas del verano, el mantenimiento de la cadena frío corre peligro, así que asegñurate de comprar en establecimientos cercanos a tu casa, dejando siempre la carne para el final y sobre todo, utilizando bolsas isotérmicas que favorezcan su conservación.
2. La carne congelada, a -18º C
Cuando vayamos a congelar la carne, una vez llegue a nuestra casa, debemos hacerlo inmediatamente para evitar que los microorganismos penetren en ella.
Una vez dentro del mismo, debemos asegurarnos de que la temperatura esté como mínimo a -18º C, ya que a partir de esa graduación, la carne estará protegida por completo de la aparición de microorganismos.
3. No almacenar la carne durante demasiado tiempo
Si únicamente decidimos refrigerar la carne fresca, debemos tener en cuenta que, durante el verano, se mantendrá en perfecto estado durante menos tiempo que de costumbre, por lo que debes prestar mucha atención a esta cuestión.
En el caso de la carne cortada en filetes o porciones más pequeñas, no se aconseja conservarla durante más de tres días, una vez abierto el envasado, mientras que la carne picada conlleva más riesgos y solo se mantendrá en perfecto estado durante un par de días.
En el caso de nuestra carne ecológica, los riesgos son menores, ya que las bandejas termoselladas permanencen en perfecto estado hasta cinco días más, al estar completamente aisladas
4. La aglomeración en el frigorífico no ayuda
Para que la carga de frío se distribuya correctamente entre todos los alimentos, no debes acumular demasiados alimentos en el frigorífico, pues de esta manera, impedirías que la carne reciba toda la refrigeración que necesita.
Si después de comprar carne ecológica, sigues estos consejos, no tendrás ningún problema en verano y en cualquier época. Te asegurarás de consumir un producto de calidad y en perfecto estado.