Solomillo ecológico con salsa de turrón y rúcula crujiente

Esta receta además de ser muy sencilla de preparar, se puede dejar hecha el día anterior. Solo tendrás que darle un golpe de calor en el horno. La rúcula crujiente sí debes prepararla al momento para que no pierda textura.

El solomillo de cerdo combina a la perfección con el dulce del turrón. Para que la salsa nos sea muy empalagosa, utilizaremos un vino seco que equilibre los sabores. Nosotros hemos optado por un oloroso, pero también puedes usar un blanco seco de tu gusto.

Las comidas navideñas suelen ser muy copiosas. Por eso, hemos preparado una guarnición ligera de rúcula. El sabor almendrado de la rúcula es perfecto para esta receta y el toque crujiente aporta complejidad de texturas al plato sin complicarte la vida.

Ingredientes

  • 1 solomillo de cerdo ecológico Campos
  • 50 gramos de turrón blando (Jijona)
  • 200 mililitros de vino oloroso seco
  • 100 mililitros de nata para cocina
  • 20 gramos de mantequilla
  • 30 gramos de almendras tostadas y saladas
  • 1 bolsa de rúcula
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Pimienta negra
  • Sal

Elaboración

Corta el solomillo en medallones y salpimenta. Pon a derretir la mantequilla en una sartén y dora los medallones de solomillo a fuego fuerte. No se tienen que cocinar del todo, solo tomar un bonito color tostado por fuera. Retira los medallones de la sartén y reserva.

Añade el vino a la sartén y desglasa el fondo con ayuda de una cuchara o espátula de madera. Rasca bien el fondo para que todos los jugos que ha soltado el solomillo se integren con el vino. Cuando se evapore el alcohol, añade la nata líquida y el turrón en trocitos pequeños. Cocina a fuego medio hasta que el turrón se deshaga.

Incorpora de nuevo los medallones de solomillo ecológico a la sartén. Cocina a fuego medio durante 10 minutos.

En el último momento, preparamos la rúcula crujiente. Pon la rúcula en un bol y añade sal y un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Pon una hoja de papel vegetal en un plato apto para microondas y extiende una capa de hojas de rúcula. No las amontones, es mejor hacer varias tandas. Mete en el microondas durante dos minutos a máxima potencia. Comprueba si está crujiente y si necesita más tiempo, mete durante intervalos de 30 segundos para que no se queme.

Propuesta de emplatado

Vamos a emplatar para que quede bonito. Pon una cucharada generosa de salsa en el fondo y con la misma cuchara, extiende hacia un lado para darle forma. Pon encima un medallón de solomillo y monta otro medallón encima para dar volumen. Añade un montoncito de rúcula crujiente. Pica las almendras en trozos irregulares y remata el plato con una lluvia de almendras.